La otra cara de Ibarra.

Su profesión viene de familia, su padre es abogado como él y algunos de sus hermanos. Tiene dos referencias importantes del barrio donde creció, la primera es en Bahía Blanca porque a su papá lo trasladaron a ese lugar por trabajo cuando tenia 6 años, tuvo dos años viviendo en una casa con parque que volvió ya de grande en una campaña electoral. Luego desde los ocho años vivió en Buenos Aires, en Av. Pueyrredon y Av. Las Heras donde disfruto de la plaza que aún sigue estando en esa esquina porteña.
La abuela de Aníbal Ibarra vivió en Banfield y siempre la fue a visitar, para él y sus hermanos era toda una verdadera experiencia. El aroma que recuerda de esa época es la planta del tomate, porque una vez de grande cuando hizo una pequeña huerta al tomar un tomate en sus manos le viene a la mente las vivencias que pasaba en esa casa, donde disfrutaba de la naturaleza, de la vida barrial donde le daba de comer a las gallinas.
Dice que no tiene recuerdos de los sus primeros años, pero lo que se acuerda cuando era chico es que vendían huevos en Bahía Blanca, paso una adolescencia tranquila, adorando a los animales.
Se siente contento con la vida, no cree que todo fue perfecto, con un poco más de 50 años a su altura piensa que tuvo una infancia y adolescencia bárbara con una buena relación de hermanos y familiares. En la actualidad y desde siempre disfruto de sus dos hijos, Pablo y Santiago, los vivió en todo momento.
Entro a la política a los 15 años a través de la secundaria, militaba, participaba en el centro de estudiantes, participaba de asambleas, luego en el año 1991 desde hoy en día trabajo en esta área. “la política es un medio muy complicado, atrapante, es como una jungla, no es un escenario sencillo, hay guerra, competencias, hay cosas buenas y cosas malas como en todos lados” dijo Aníbal Ibarra.
Con respecto al amor, a los sentimientos dijo: “cada uno vive sus experiencias y es bueno que cada uno las viva, pasa por el respeto del otro, pasa también por manejarlo con libertad, para mi algo que es muy dañino en las relaciones es la posición es casi traducir las relaciones en propiedades, nadie es propietario de la otra persona”. Tuvo parejas importantes, duraderas, pocas que le hayan pegado como dice. Tiene buenos recuerdos de todas las relaciones y espera que “haya dejado buenas huellas”.
Es de ir al supermercado, tanto cuando era jefe de gobierno como en la actualidad. Reconoce que es una persona sensible y más a medida que va a pasando el tiempo. La otra cara de un legislador porteño: Aníbal Ibarra.

Entrevista a Aníbal Ibarra en el programa “Radiografías del alma” por FM Palermo 94.7 Mhz. que fui invitado por el conductor del programa: Cristian Salas en el día 5 de agosto de 2009.

MUCHAS GRACIAS CRISTIAN POR LA INVITACIÓN A TU PROGRAMA PARA ESTA ENTREVISTA